Durante tres años el Ayuntamiento de Barcelona ha llevado a cabo una campaña para la mejora de la limpieza de los espacios públicos de la ciudad, dirigida a la ciudadanía y a los comercios. Lavola ha trabajado en este proyecto sin precedentes desde su inicio y ha visto recogidos los frutos de las acciones de sensibilización realizadas.

El Ayuntamiento de Barcelona puso en marcha el año 2017 la campaña de sensibilización para la mejora de la limpieza de las calles y plazas de la ciudad. Un proyecto de gran envergadura por el que Lavola, presente desde el inicio, ha podido aportar mejoras año tras año, focalizando y perfeccionado las acciones se han llevado a cabo para potenciar el impacto global de la campaña y consolidando el equipo de personas informadoras ambientales que ha participado.

El balance de la campaña después de tres años de actuación es muy positivo, sólo durante 2019 se han sensibilizado a más de 255.000 personas y más de 33.000 comerciantes. Las acciones realizadas han servido para poner de relieve datos significativos que demuestran la consolidación de hábitos limpieza del espacio público entre la población barcelonesa:

  • El 77% de la ciudadanía encuestada declara ser conocedora de los puntos verdes de barrio, con un aumento de 8% respecto el 2017.
  • La separación de la fracción orgánica está bien aceptada en la ciudad, el 60% del vecindario encuestado declara que lo hace correctamente.
  • La sensibilización sobre la recogida de excrementos de los animales está acostumbrada, así lo declara el 98% de los propietarios de perros encuestados, y la limpieza de orines y ha aumentado en un 22% respecto al año 2017, mostrando una gran mejora en este aspecto.
  • El servicio de recogida de muebles y trastos viejos ha mejorado un 16% respecto al año 2017, siendo actualmente el 64% de la población encuestada la que afirma hacer un buen uso de este servicio.

Durante el 2017 de entre las acciones realizadas destaca el seguimiento de los puntos críticos de limpieza de la ciudad y también la recopilación de las incidencias de los comercios. Igualmente es relevante el diseño y la producción de recursos didácticos para complementar las acciones de sensibilización y motivar la interacción con la ciudadanía.

En la campaña de 2018 se incorporaron nuevos mensajes relacionados con el residuo cero y se aprovecharon los resultados obtenidos el año anterior para hacer una propuesta de seguimiento de los puntos críticos. También se amplió el horario de actuación incluyendo la franja nocturna durante los meses de verano y los sábados para tener incidencia durante actos de participación ciudadana como ferias comerciales, fiestas mayores de barrio o eventos puntales de la ciudad. Como complemento, se desplegó una estrategia de comunicación en redes sociales y también se dio mayor visibilidad a las acciones con el uso de cinco bicicletas eléctricas con un remolque informativo. Asimismo se iniciaron acciones de sensibilización en colaboración con redes de entidades y asociaciones, por ejemplo de personas recién llegadas.

Finalmente, en la última etapa de la campaña en 2019 se ha incorporado la temática de la gestión de los plásticos en apoyo a la campaña municipal #plàsticzero y se han consolidado las líneas de actuación anteriores para informar sobre el residuo cero y la materia orgánica, sensibilizar a los propietarios de perros para la recogida de excrementos y la limpieza de orines, mejorar el conocimiento sobre los diferentes sistemas de recogida y la recogida y de muebles y trastos viejos. Y, siguiendo con las acciones precedentes, se ha desplegado una relación colaborativa con entidades, asociaciones y centros cívicos para llevar a cabo talleres de sensibilización.

Con la colaboración en esta campaña de larga duración Lavola ha acumulado una experiencia contrastada en estrategias para empatizar y sensibilizar a la ciudadanía, en el tratamiento de datos y la evaluación del impacto de las acciones, y en la gestión y coordinación de equipos de personas informadoras ambientales.