Reunimos a Josep Melero, jefe de Sección de Divulgación y Comunicación de la Gerencia de Servicios de Espacios Naturales de la Diputación de Barcelona, ​​y Pere Pous, Presidente de Lavola, en el Parc Natural del Montseny para disfrutar y conversar sobre lo que nos apasiona; el medio ambiente y la educación ambiental, con motivo del 36º aniversario del programa “Coneguem els nostres parcs”.

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El lugar elegido para el encuentro no es en vano, las raíces de la educación ambiental en Cataluña se encuentran en el Parc Natural del Montseny donde, hace cuarenta años, se fundó la primera escuela de naturaleza de España. Y, cuatro años después de este hito, se creó el programa “Coneguem els nostres parcs” de la Diputación de Barcelona; el programa decano de la educación ambiental en Cataluña. Se trata de un proyecto que treinta y seis años después de su disparo de salida y, a pesar de encontrarnos en un contexto diferente, sigue teniendo unos objetivos plenamente vigentes:

Cuando nació el programa apenas acababa de salir del franquismo, era una época en que todo se estaba construyendo, y muy pocos escolares acercaban a la naturaleza,argumenta Melero. Se quería llevar al territorio, a los espacios naturales protegidos, a unos chicos y chicas que seguramente nunca habían salido de su ámbito urbano. El “Coneguem els nostres parcs” suponía, al igual que lo hace hoy en día, una oportunidad para que los escolares del Área Metropolitana de Barcelona puedan conocer de cerca cómo es un espacio natural protegido y cuáles son sus valores intrínsecos.

 El programa significa para muchos escolares el contacto directo con la gestión y la preservación de un espacio natural protegido.

Incide Melero en que precisamente el valor primordial del programa es el de acercar a los niños y niñas de nuestras escuelas a conocer cuál es el valor natural y patrimonial de estos espacios protegidos. Y señala, con la vista puesta sobre el horizonte del Montseny, que todo lo que puede pasar en un parque natural puede explicarse a través del programa siendo la lectura del paisaje una de las tareas primordiales del programa “Coneguem els nostres parcs”.

Pere Pous se suma a subrayar la vigencia del programa y lo vincula con el hecho de que la educación ambiental está y ha estado siempre muy ligada a la naturaleza, tratándose de una educación hecha sobre el medio, en contacto con el medio, que tenga compromiso y que esté a favor del medio. Unos valores que Pous considera que perduran.

El equipo de la Diputación de Barcelona y de Lavola, reunidos en el Parc Natural del Montseny

 

Ciertamente son unos valores necesarios frente al cambio de modelo educativo que propone el Estado español, en el que el papel de la educación ambiental queda relegado a favor de asignaturas de carácter tecnológico como son las TIC, la robótica y la programación con Scratch. En este contexto, los programas de educación ambiental que se han mantenido firmes en su vocación de acercar a los niños a los entornos naturales, ofreciendo visitas guiadas con expertos del territorio, son imprescindibles. La oferta tradicional de hacer una excursión a la naturaleza es claramente necesaria para reforzar la carencia de estos conocimientos en las aulas, y el “Coneguem els nostres parcs” con más de 8.000 participantes anuales, es un claro ejemplo.

Más allá, Pous remarca otro aspecto que ha cambiado desde que se inició este programa y tiene que ver con la concienciación sobre la preservación de los entornos naturales. Antiguamente la educación ambiental no era una cuestión tan generalizada como ahora, que se acepta como necesaria y que está en sintonía con lo que se quiere comunicar.

En este sentido se pone sobre la mesa el papel que deben jugar los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS), en relación a los que Melero apunta que todas las administraciones públicas deben encaminarse sus tareas hacia los ODS y remarca el decimoséptimo objetivo de los ODS, las alianzas, como un elemento imprescindible para poder sacar adelante un programa como el “Coneguem els nostres parcs”.

Precisamente Lavola somos aliados de la tarea educativa que se promueve con el programa en relación a la educación para el desarrollo sostenible, ya que, desde su inicio colaboramos con la gestión y la dinamización de las visitas que se realizan en los espacios naturales protegidos de la Diputación. Hemos podido vivir de primera mano cómo el programa ha crecido, ha evolucionado y se ha consolidado en la oferta educativa del país. Convirtiéndose en un programa que mantiene su esencia, apostando por una oferta que combina las explicaciones en el aula, conducidas por una persona profesional de la educación ambiental o bien por el equipo de maestros, con una visita a los espacios naturales protegidos, a la vez que ha sabido actualizarse y dar respuesta a las necesidades educativas actuales cambiando la metodología, los materiales y los recursos que se utilizan,

Tanto Melero como Pous valoran muy positivamente el enriquecimiento que supone la sinergia entre la administración pública y la empresa privada, permitiendo aportar elementos diferenciales que salen de la esfera de la administración pública y haciendo que los proyectos avancen y se enriquecen gracias a los equipos de personas que los lideran. Como apunta Josep Melero, en última instanciala educación ambiental es las personas implicadas en los proyectos.